CULTIVO DE MANGO
El mango está
reconocido como uno de los 3 ó 4 frutos tropicales más finos. Es una
fruta que se obtiene del árbol del mismo nombre.
Tiene forma ovalada, con la piel no comestible y color variable de amarillo pálido a rojo intenso. La pulpa es pegajosa y su coloración también varía, desde amarillo a anaranjado. El sabor del mango maduro es dulce, y bastante ácido cuando aún está verde. Es una fruta jugosa y fibrosa, y poseen un hueso interior. Su tamaño varía entre 5-20 cm de longitud, con un peso de 300-400 g, llegando algunas piezas a alcanzar más de un kilo.
Tiene forma ovalada, con la piel no comestible y color variable de amarillo pálido a rojo intenso. La pulpa es pegajosa y su coloración también varía, desde amarillo a anaranjado. El sabor del mango maduro es dulce, y bastante ácido cuando aún está verde. Es una fruta jugosa y fibrosa, y poseen un hueso interior. Su tamaño varía entre 5-20 cm de longitud, con un peso de 300-400 g, llegando algunas piezas a alcanzar más de un kilo.
Alimentación y nutrición
El mango es una fruta con un elevado contenido en
glúcidos. Su contenido en fibra no soluble es bajo, al igual que su
valor calórico. El mango puede reducir el riesgo de contraer
enfermedades en general por intensificar las funciones inmunológicas.
El mango (Mangifera
indica L.) está reconocido como uno de los 3 ó 4 frutos tropicales más
finos. Es una fruta que se obtiene del árbol del mismo nombre.
Tiene forma ovalada o esferoidal, con la piel no comestible y color variable de amarillo pálido a rojo intenso. La pulpa es pegajosa y su coloración también varía desde amarillo a anaranjado. El sabor del mango maduro es dulce, y bastante ácido cuando aún está verde. Es una fruta jugosa y fibrosa, siendo menso fibrosas las variedades mejoradas. Todas ellas, ya sean variedades mejoradas o no, poseen un hueso interior. Su tamaño varía entre 5-20 cm de longitud, con un peso de 300-400 g, llegando algunas piezas a alcanzar más de un kilo.
El mango es también conocido como "melocotón de los trópicos" por su anaranjado color y agradable sabor. El más fiable signo revelador de su madurez es su olor. Cuando el fruto está maduro al ser presionado con los dedos cede fácilmente.
Por su extraordinario sabor, aroma, color y textura resulta ideal para consumir solo, en macedonias, elaborar sorbetes, tartas y mermeladas, mezclar en ensaladas e incluso cocinar como condimento de carnes y pescados. En la India, el mango verde es el ingrediente básico para elaborar el tradicional chutney.
Los mangos son laxantes y altamente nutritivos. También son una importante fuente de vitamina A y algo menor de B y C.
Por cada 100 g de mango comestible aporta 60,28 kcal, 0,5 g de proteínas, 0,10 g de grasa, 15,30 g de hidratos de carbono, y 1,50 g de fibra.
Entre los minerales, destaca el hierro, pero también aporta potasio, fósforo, sodio y calcio.
Los mangos maduros no soportan bien el transporte porque son muy sensibles a golpes y les dañan las bajas temperaturas (menores de 13ºC). Las frutas cosechadas verdes pueden alcanzar su punto de maduración a una temperatura entre 25 y 30ºC.
Las temperaturas óptimas de conservación para este tipo de fruta son los 13ºC para mangos maduros y verdes, así como las humedades relativas óptimas oscilan los 90-95%.
El mango que aún está verde se ha de mantener a temperatura ambiente hasta que alcance el punto óptimo para su consumo. Sólo si se quiere consumir frío se puede mantener en el refrigerador antes de servirlo y sólo durante el tiempo necesario para enfriarlo.
Tiene forma ovalada o esferoidal, con la piel no comestible y color variable de amarillo pálido a rojo intenso. La pulpa es pegajosa y su coloración también varía desde amarillo a anaranjado. El sabor del mango maduro es dulce, y bastante ácido cuando aún está verde. Es una fruta jugosa y fibrosa, siendo menso fibrosas las variedades mejoradas. Todas ellas, ya sean variedades mejoradas o no, poseen un hueso interior. Su tamaño varía entre 5-20 cm de longitud, con un peso de 300-400 g, llegando algunas piezas a alcanzar más de un kilo.
El mango es también conocido como "melocotón de los trópicos" por su anaranjado color y agradable sabor. El más fiable signo revelador de su madurez es su olor. Cuando el fruto está maduro al ser presionado con los dedos cede fácilmente.
Por su extraordinario sabor, aroma, color y textura resulta ideal para consumir solo, en macedonias, elaborar sorbetes, tartas y mermeladas, mezclar en ensaladas e incluso cocinar como condimento de carnes y pescados. En la India, el mango verde es el ingrediente básico para elaborar el tradicional chutney.
Los mangos son laxantes y altamente nutritivos. También son una importante fuente de vitamina A y algo menor de B y C.
Por cada 100 g de mango comestible aporta 60,28 kcal, 0,5 g de proteínas, 0,10 g de grasa, 15,30 g de hidratos de carbono, y 1,50 g de fibra.
Entre los minerales, destaca el hierro, pero también aporta potasio, fósforo, sodio y calcio.
Los mangos maduros no soportan bien el transporte porque son muy sensibles a golpes y les dañan las bajas temperaturas (menores de 13ºC). Las frutas cosechadas verdes pueden alcanzar su punto de maduración a una temperatura entre 25 y 30ºC.
Las temperaturas óptimas de conservación para este tipo de fruta son los 13ºC para mangos maduros y verdes, así como las humedades relativas óptimas oscilan los 90-95%.
El mango que aún está verde se ha de mantener a temperatura ambiente hasta que alcance el punto óptimo para su consumo. Sólo si se quiere consumir frío se puede mantener en el refrigerador antes de servirlo y sólo durante el tiempo necesario para enfriarlo.
La planta
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